Hoy, me he dado cuenta leyendo la carta de otra persona, que si no ha sufrido tanto como yo, si lo ha hecho de forma similar o mas intensamente, la perdida de un amor siempre es traumatica, algo que nunca se olvida y siempre se queda en el corazón, pase el tiempo que pase, siempre se nos queda en forma de dolor al principio y que después de tantas lagrimas que nos va curando, y es el tiempo el que nos va suavizando la herida y cicatrizando en el alma, las palabras del todo inútiles, bien escuchadas hacen que nos demos cuenta que no solo nosotros sufrimos, hay miles de mundos, miles de almas que lloran, por doquier, tras las ausencias de los seres que queremos y que nos dejaron su huella en nosotros.
No quiero olvidar que pasaste por mi vida, dejándome lo mejor de ti.
yo creo en mi, creo en ti y quiero ver hasta donde llega tu poder en mi.
Sé que has sufrido, tanto como yo, que has dormido bañada en lagrimas, como lo he hecho yo, por lo cual han encogido los ojos y rasgados se han vuelto abrir, perdiendo el miedo se han vuelto abrir y jamas te olvidaré mi dulce amor.
yo creo en mi, creo en ti y quiero ver hasta donde llega tu poder en mi.
Sé que has sufrido, tanto como yo, que has dormido bañada en lagrimas, como lo he hecho yo, por lo cual han encogido los ojos y rasgados se han vuelto abrir, perdiendo el miedo se han vuelto abrir y jamas te olvidaré mi dulce amor.
Los recuerdos que ya son historia en la vida de cada uno y que nunca se volverán a repetir, al menos con la misma fuerza para los dos, a pesar de todo, volveré a vivir, volveré a sentir un alma muy cerca de mi.
Volveré a cantar, a bailar y a reír, y si en algún momento tu imagen se refleja en mi horizonte, entenderé que estás contenta por mi, y que tu recuerdo siempre vivo en mi, seguirá viviendo en mi, mientras un hálito de aire corra por mis maltrechos pulmones.
Volveré a cantar, a bailar y a reír, y si en algún momento tu imagen se refleja en mi horizonte, entenderé que estás contenta por mi, y que tu recuerdo siempre vivo en mi, seguirá viviendo en mi, mientras un hálito de aire corra por mis maltrechos pulmones.
Ahora tengo que vivir, por ti, por mi, por los que quedan, por los sueños que no pudimos cumplir, los cuentos son escritos por susurros de ilusión que las estrellas mandan cada noche a nuestros sueños, así te dejaré marchar, así te dejaré vivir en mi, como el silencio vive en la eternidad.
Andrés Ts.